Algunas empresas no consiguen buenos resultados externalizando sus procesos de selección. Sistemáticamente, sea cual sea el headhunter con el que cooperan, los resultados son los mismos: negativos. Por suerte esto ocurre en una pequeña minoría de empresas. Pero, aun así, nos hacemos la siguiente pregunta: ¿por qué la externalización en algunas compañías no funciona? ¿Estarán eligiendo mal a sus reclutadores?
En caso de colaborar con diversos recruiters, nos atrevemos a afirmar que el problema no es que estén escogiendo mal. En ocasiones puntuales la elección puede llegar a ser desacertada. Sin embargo, si diversifican la selección de reclutadores, es muy improbable que ocurra siempre.
Todo indica que las razones proceden de la propia empresa. Concretamente, según testimonio de varios consultores de selección con los que hemos hablado, de creencias equívocas que tienen. Así pues, vamos a desmentir un par de mitos sobre los recruiters que algunos departamentos de RRHH se creen a raja tabla.
1) Es un apagafuegos
Pongamos que tras la imposibilidad de encontrar un candidato adecuado decides externalizar el proceso de selección.
En situaciones como estas se tiende a usar al reclutador como apagafuegos. La empresa colabora con él o ella sin tener suficiente confianza en sus resultados. Es solo un recurso de última hora del que se espera un milagro, o que se convierta en el blanco fácil de críticas.
A un buscador de talento no le entusiasma trabajar en estas circunstancias. Ni a un buscador de talento, ni a nadie. Sin confianza mutua desde un inicio no se consiguen buenos resultados.
Si quieres saber más sobre la importancia de la confianza entre employer y recruiter en un proceso de selección, te invito a leer nuestro artículo 3 motivos por los que debes confiar en tu Recruiter.
2) Tiene poderes telepáticos
A veces, la persona que ejerce de nexo entre la empresa y recruiter no tiene respuestas a todas las cuestiones del último. Esto no debería ser un inconveniente siempre que el headhunter pueda contactar con personas de la empresa capaces de resolverlas.
El problema surge cuando desde la empresa se le niega la posibilidad de crear puentes de comunicación con estas personas. Y es que al consultor de selección solo le queda una única opción para realizar una buena búsqueda: leer la mente del cliente. Asumámoslo, es bastante improbable que pueda lograrlo. Es por eso por lo que insistimos en la importancia de proporcionarle la información adecuada.
Precisamente, para que puedas evitar obstáculos habituales en la colaboración con un reclutador, te invito a leer los siguientes artículos:
Y tú: ¿Conoces otras falsas creencias que dificulten el entendimiento entre RRHH y un consultor de selección? ¿Te has encontrado con alguna de las que hemos mencionado?
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